Resumen:
En la sociedad de la información y el conocimiento, la formación docente es un proceso formativo que conlleva desafíos, toda vez que los docentes necesitan prepararse con nuevas competencias para afrontar su gestión como educadores en el siglo XXI. En este contexto, la competencia para el manejo de emociones se vuelve una necesidad ineludible de las aulas universitarias, con la perspectiva de que las emociones influyen en las metodologías de enseñanza aplicadas tanto dentro como fuera del quehacer educativo. Esta investigación tiene como objetivo evaluar las competencias emocionales de los docentes en formación inicial, comprendiendo que el constructo competencia emocional para este estudio son la atención, la claridad y la reparación de emociones. Para el análisis empírico se aplicó el test Trait Meta Mood-Scale (TMMS-24) de Salovey y Mayer (1995) adaptado por Fernández-Berrocal, a 500 estudiantes de la Carrera de Educación Inicial, modalidad presencial, de la Universidad de las Fuerzas Armadas ESPE en el período académico ordinario (POA 202251), correspondiente a noviembre 2022–marzo 2023. En algunos estudios (Fernández-Berrocal et al., 2004) demuestran que los estudiantes necesitan mejorar su claridad emocional, porque en algunos casos, a pesar que su atención y reparación son adecuadas, no comprenden sus emociones. Se concluye que las competencias emocionales permiten al docente en formación inicial, conocer su inteligencia emocional y cómo ésta influye en su gestión de enseñanza-aprendizaje, dentro del campo laboral.
