Resumen:
La tendencia de la economía mundial, la globalización de los mercados y el
movimiento de los capitales aumenta cada año. Como consecuencia las organizaciones se
enfrentan a un nuevo entorno de desarrollo y deben adoptar las estrategias más convenientes.
El progreso industrial no se reduce sólo a la inversión en nuevas instalaciones de producción y
a la transferencia de tecnología extranjera, sino que es prioritario utilizar eficazmente las
instalaciones actuales, donde uno de los requisitos fundamentales es el establecimiento de un
servicio sistemático y técnico de mantenimiento eficiente, seguro y económico de los equipos
industriales.
Los dos sistemas aplicables de mantenimiento que están dando los resultados más
eficaces para lograr una optimización industrial rápida son el TPM (Mantenimiento
Productivo Total), que busca el mejoramiento continuo de la productividad con la
participación de todos, y el RCM (Mantenimiento Centrado en la Confiabilidad), que
optimiza la implementación del mantenimiento preventivo, basado en la confiabilidad de los
equipos.
El TPM es un moderno sistema gerencial de soporte al desarrollo de la industria que
permite tener equipos de producción siempre listos. Su metodología, soportada por un buen
número de técnicas de gestión, establece las estrategias adecuadas para el aumento continuo
de la productividad, con miras a lograr el éxito y la competitividad, el proceso de
internacionalización y apertura de la economía.